¿Limpias con regularidad tu PC? Deberías, porque el polvo puede llegar a estropearlo
Actualizado: 5 jul 2022

Info tomada de : hardzone.es/tutoriales/mantenimiento/limpiar-polvo-pc/
La limpieza del interior del PC es algo esencial, y ya no solo por higiene, sino porque se reduce la vida útil de nuestro hardware e incluso podríamos llegar al extremo de que se nos estropeen los componentes. A continuación, vamos a contarte por qué es tan importante mantener el interior de nuestro PC libre de polvo y suciedad. Es inevitable que entre polvo al interior del PC, incluso aunque tengamos filtros anti polvo. Estas partículas y sus ácaros están en todas partes, y mientras haya algún ventilador en el equipo, estaremos provocando que, de una manera u otra, el polvo termine depositándose en nuestro hardware.
Por este motivo, y por lo que os vamos a contar a continuación, es esencial realizar una limpieza del interior del PC cada cierto tiempo para evitar que este polvo que es inevitable que se acumule termine causando algún problema.
El polvo termina solidificado en forma de hollín.

Cuando el polvo se acumula mucho, termina solidificándose en forma de hollín, y en un PC este proceso se ve acelerado a causa del calor que generan los componentes (por este motivo la acumulación de polvo en el PC se ve de color marrón con el paso del tiempo, en lugar de gris como sucede al principio).
Cuando el polvo se solidifica, comienza a tapar especialmente las rejillas por las que entra el aire taponándolas y evitando, precisamente, que entre aire fresco al interior. Por este motivo, se entorpecerá el flujo de aire y provocará que suba la temperatura de los componentes. Los filtros anti polvo están diseñados para colocarse en las rejillas de entrada de aire, y por norma general se pueden poner y quitar fácilmente para que podamos limpiarlos de forma regular.
No obstante, incluso con filtros las partículas más pequeñas de polvo terminan entrando y depositándose en nuestro hardware, por lo que al final el interior terminará igualmente con polvo. Los filtros quitan mucho trabajo, desde luego, pero no hacen a nuestro PC inmune al polvo.
En la imagen de arriba podéis ver un caso bastante extremo, posiblemente de alguien que no ha limpiado jamás el interior de su PC, y donde el polvo ha creado una capa esponjosa claramente palpable.
Evidentemente el flujo de aire de ese equipo está completamente colapsado y los componentes estarán soportando mucho más calor del que deberían en condiciones normales. Esto lógicamente acorta la vida útil de los componentes, y puede llegar a provocar fallos.
Thermal Throttling

El Thermal Throttling es la consecuencia directa de que suba el calor de los componentes por culpa del polvo. Este fenómeno consiste en que la CPU o GPU tienen que bajar su rendimiento para poder «autorefrigrerarse», ya que a mayor rendimiento, más consumo y, por ende, más temperatura. Este sistema fue ideado para preservar la vida útil de los componentes, ya que la mayoría de usuarios no suelen atender a este tipo de cosas. Al final, el polvo de nuestro PC causa un efecto dominó:
Se instala en los ventiladores.
Los ventiladores tienen que girar más rápido para disipador de la caja o los componentes, ya que están colapsados.
Los componentes se calientan más.
Hay más aire caliente en la caja.
El Thermal Throttling termina actuando, bajando el rendimiento de los componentes.
Hace que el equipo sea más ruidoso

El polvo también se deposita en las aletas de los ventiladores. Esto produce que las aspas estén desequilibradas y que pesen más (aunque sea poco), por lo que el motor deberá funcionar a una cadencia para la que no ha sido diseñado, y puede terminar estropeándose. Se estropee o no, a buen seguro hará mucho más ruido que si los ventiladores estuvieran limpios. Esto nos hace volver también al apartado de la temperatura, porque los ventiladores que están en disipadores o radiadores son especialmente vulnerables a la presencia del polvo. Crearán una capa sólida en la entrada de aire de las rejillas o entre las aletas, provocando que no pueda pasar el aire, haciendo mucho ruido (ya que el aire saldrá por donde no debe) y no refrigerando en absoluto el disipador o radiador, haciendo que el procesador se caliente en exceso y pudiendo llegar a dañarlo.
El polvo en el PC puede llegar a producir cortocircuitos

Por desgracia, el hollín que forma el polvo combinado con el calor es conductor de la electricidad. Cuando se deposita sobre la placa base o cuando entra al interior de la fuente de alimentación, puede llegar a hacer contacto donde no debe, con la mala suerte de que podría producir un cortocircuito. Si esto se produjera, sería todo un desastre porque dejaría inutilizado el PC, y podría llevarse por delante la fuente de alimentación en el mejor de los casos, y el resto del hardware en el peor de ellos.
Evidentemente todo esto son en casos extremos, cuando no se tienen ningún cuidado con el PC, y habrá gente que te dirá que nunca han limpiado su PC y sigue funcionando (sí, pero ¿en qué condiciones de ruido, temperatura e higiene?). Dejando de lado que es recomendable limpiar por dentro el PC cada cierto tiempo aunque sea solo por higiene, también necesitamos hacerlo para preservar la temperatura, ruido e integridad de nuestro hardware. No decimos que haya que limpiar el PC todas las semanas, pero una limpieza por encima una vez cada tres meses nunca está de más, así como una limpieza en profundidad una vez al año.
Peor higiene por culpa del polvo del PC

Pensad que si no limpiamos los ventiladores, ni el interior de la caja, favoreceremos la creación y expansión del polvo. Aunque creamos que este problema solo afecta a la caja, estaremos equivocados porque pronto veremos motas de polvo por los alrededores próximos. Como es lógico, nuestro PC suele estar próximo al escritorio, el cual terminará siendo invadido por el polvo del primero. Nosotros recomendamos una buena higienización de los equipos por cosas como esta, tened en cuenta que con el polvo llegan los ácaros. Para limpiar nuestra caja correctamente, aconsejamos el alcohol isopropílico y aire comprimido para el polvo más solidificado.
Además, piensa que con la situación de la pandemia mundial por culpa del COVID-19, la higienización de los periféricos del equipo ha cobrado ahora más importancia que nunca, y ya no solo por los ácaros del polvo sino también por las bacterias y demás que pueden conllevar problemas para los usuarios. Y si no te convence todo esto, que sea aunque sea por estética: a nadie le gusta ver un PC o una pantalla llenos de polvo.